Resumen

Toda la información estructural de fallas y vetas con relleno mineral identificada en bancos y túneles de Chuquicamata fue georreferenciada, digitalizada y, de acuerdo con su mineralogía, asignada a uno o más de los eventos de alteración desarrollados entre 35 y 31 Ma. La distribución espacial de los eventos hidrotermales proyectada dentro del esqueleto de fallas mayores indica que estas tuvieron un comportamiento permeable o impermeable a lo largo del tiempo. Sobre la base de la distribución de las vetillas, se realizó un análisis de la orientación de los esfuerzos para cada evento de alteración. El análisis indica que las trayectorias del esfuerzo horizontal local no son lineales ni coaxiales a través de los eventos de alteración, se diferencian de las etapas anteriores y posteriores, y no coinciden con la orientación este-noreste inferida para el esfuerzo tectónico regional. Las diferencias entre las trayectorias de esfuerzo local con la del regional a lo largo de la evolución del sistema se asocia con las variaciones dinámicas de las componentes de esfuerzos termales y elásticos durante el alzamiento y erosión. El esfuerzo diferencial calculado para las primeras etapas de alteración fue contraccional, el que decreció hasta uno isotrópico en la inversión de contracción a extensión, en donde se genera la principal mineralización hidrotermal, y se vuelve extensional en las etapas más tardías y someras. Las fluctuaciones de los esfuerzos locales conducen a reacomodos de los esfuerzos e interacciones cíclicas con fluidos, que gatillan reactivaciones locales de fallas, modificación de zonas de brechas y daño, creación/destrucción de permeabilidad y descarga de fluidos hidrotermales durante la evolución del sistema.

Video